The Waterboys son una banda escosesa-irlandesa de música folk (íbamos a poner folk rock, pero es un término que el líder de la banda, el gran Mike Scott, odia profundamente). Tienen personalidad propia y una elegancia en su música que nos encanta.
La canción Don't Bang The Drum aparece en su tercer disco, This Is The Sea, de 1985. Mike Scott describe el álbum como "el disco en el que logré todas mis ambiciones musicales juveniles, la expresión final y plenamente realizada del sonido de los primeros Waterboys", influenciado por The Velvet Underground, el disco Astral Weeks de Van Morrison y Steve Reich, pionero de la música minimalista.
Karl Wallinger, que se había unido a la banda en 1983, hizo una demo donde estaban establecidas la melodía y los acordes, aunque el ritmo y la sensación que tiene la canción, así como la letra, fueron obras de Mike Scott. "Tener a Karl en el estudio era como tener una orquesta de un solo hombre alrededor. Podría haber habido un This Is The Sea sin él, pero no habría sido lo mismo, o tan bueno."Se grabó en Livingston Recording Studios de Londres en mayo de 1985. La maravillosa trompeta de la introducción es de Roddy Lorimer. Mike Scott la definió como "un luminoso solo de trompeta de alto vuelo en forma libre en el estilo de Sketches Of Spain de Miles Davis sobre un paisaje oscuro de guitarra y piano."
La crítica recibió muy bien la canción. Esther Murray de Spin: "Es un enorme trozo de teatro que se tambalea y se tambalea, que se abre con una cadencia grandilocuente, un trasfondo de vibraciones relucientes, ritmos de guitarra acústica y piano que te estremecen delicadamente. Mientras el clímax de la trompeta hierve, la introducción irrumpe en un ritmo eléctrico y duro que Scott ataca con un miedo punzante como los gritos moribundos de un animal sacrificado."Mike Saly de The Age: "Don't Bang the Drum' comienza con una exhortación dramática contra el militarismo y la naturaleza destructiva del hombre."
Albert
Nelson nació un 25 de abril
de 1923 en una plantación de algodón en Indianola, Mississippi. Durante su infancia cantó en el grupo
góspel de la iglesia donde su padre tocaba la guitarra. Su padre abandonó el
núcleo familiar cuando Albert era
muy niño y con 8 años se mudó con su madre y sus hermanos (tuvo hasta 12) a Indiana. Allí creció cosechando algodón
en la plantación de Forrest City. En
esos años pudo escuchar a Howlin’ Wolf,
Elmore James o T-Bone Walker. “Escuché la guitarra de Elmore James y un par de músicos más que conocí allí. Luego vino T-Bone Walker. Y eso fue todo.
Simplemente mezclé todo aquello y como no obtenía exactamente lo que tocaban,
puse lo mío.”
Su primera guitarra la
construyó con una caja de cigarros, un arbusto y fibras de una escoba. Más
tarde se compró una por 1$ y 25 centavos. Como era zurdo y aprendía por su
cuenta, simplemente ponía la guitarra al revés, dejando las cuerdas más agudas
arriba. Así, sus bendings, que solían ser de 2 cuerdas, no solían ser de abajo
a arriba, creando un sonido único. Su lema cuando tocaba: “cuanto menos, más.” Otra característica es que tocaba sin púa. “Nunca pude sostener una en mi mano. Empecé
a tocar con una pero no me metía en ella. Después de un tiempo dije; al diablo
con esto. Así que toco con la carne del pulgar.”
Mientras conseguía abrirse un
hueco en la música Albert trabajó en
plantaciones, en la construcción, etc. Su mote de bulldozer de terciopelo le viene de conducir una excavadora durante
esa época, aparte de sus dimensiones, 2 metros y 110 kg, del sonido de su
música y de su suave voz. Su primer trabajo como músico
fue con la banda Groove Boys en Osceola, Arkansas. También cantó en un
cuarteto de góspel llamado Harmony
Kings.
En 1953 se mudó al norte, a Gary, Indiana, donde trabajó en una
fundición y tocó la batería en la banda de Jimmy
Red. Albert es la batería que suena en las primeras grabaciones de Jimmy. En Gary grabó su primer sencillo, Bad
Luck Blues y Be On Your Merry Way
en la cara B para la compañía Parrot
Records. No tuvo un impacto significativo. Por aquellos años Albert Nelson ya se hacía llamar Albert King en un intento de asociarse
con B.B. King. De hecho se anunciaba
como su hermano. Años más tarde llamaría a su guitarra Lucy, la de B.B. King era
Lucille. En palabras de B.B. King: “Llamó a su guitarra Lucy y
por un tiempo dijo que era mi hermano. Eso me molestó hasta que lo conocí y me
di cuenta de que tenía razón. Él no era mi hermano de sangre, pero seguro que
era mi hermano de blues.” En el 54 volvió a unirse con
los Groove Boys.
En 1956 se mudó a Brooklyn, Illinois, al otro lado del
río de St. Louis. Formó una nueva
banda y pronto se convirtió en una atracción en la escena de los clubes
nocturnos junto a Ike Turner, Chuck
Berry o The Rhythm Kings (banda
con la que tocó Albert Ammos años
atrás).
Albert King con su primera Gibson Flying V.Año 58 o 59
En el 59 firmó con Bobbin sacando varios singles de poco
éxito. El primero de ellos I’m A Lonely
Man. Por esa época adquirió su mítica guitarra Lucy, una Gibson Flying V
Korinadel 58 en forma de
flecha, que fue rápidamente defenestrada y descatalogada. Con ella subiría el
volumen del amplificador y pasaría a la afinación Mim (6ª cuerda nunca la
usaba, Si, Mi, Sol, Si, Mi). En 1961 llegaría su primer éxito con la compañía King Records y su single Don’t Throw Your Love On Me Strong. Pero
el despegue definitivo de su carrera no sería hasta 1966 cuando decidió irse a Memphis y fichar por la Stax Records. Junto a Booker T. & The M.G.’s y los Bar-Kays grabó decenas de canciones
influyentes. Crosscut Saw o As The Years Go
Passing By son algunas de ellas. La clave del éxito fue darle
una sensación optimista y elegante de Rhythm
and Blues que las hiciera más tractivas para la radio que el más lento y
tradicional Blues.
Su primera Lucy fue robada o según dicen las malas lenguas, perdida en una
partida de dados. Gibson le prestó
una misma versión Flying V del 66
con la que grabaría el álbum de 1967 Born
Under A Bad Sign. Uno de los discos de blues más influyentes de la época.
La canción que da nombre al disco es la más conocida de Albert King. Este tema compuesto por Brooker T. Jones y William
Bell habla de aquellos que siempre han tenido la vida en contra, de los que
han nacido con mala estrella, de los que no han podido aprender a leer y a
escribir, viviendo una lucha continua y con amigos de dudosa reputación.
Nací bajo una mala
estrella,
estoy deprimido desde
que empecé a gatear.
Si no fuese por mi mala
suerte, no tendría ninguna suerte.
La mala suerte y los
problemas son mis únicos amigos,
estoy solo desde que
tengo 10 años.
No puedo leer, no
aprendí a escribir,
toda mi vida ha sido una
gran lucha.
Nací bajo una mala
estrella,
estoy deprimido desde
que empecé a gatear.
Si no fuese por mi mala
suerte, no tendría ninguna suerte.
Ya sabes, el vino y las
mujeres son todo lo que anhelo.
Una mujer con largas
piernas me llevará a la tumba.
Nací bajo una mala
estrella,
estoy deprimido desde
que empecé a gatear.
Si no fuese por mi mala
suerte, no tendría ninguna suerte.
Sí, mi mala suerte chico,
he tenido mala suerte
toda mi vida, sí.
En el Fillmore de San Francisco, 1968
Ese año, mientras tocaba en el Manhattan Club de St. Louis, el promotor Bill Graham (dio fama al Fillmore y organizó espectáculos como el Live Aid) le ofreció 1600 $ por tocar 3 noches en el Fillmore de San Francisco. “No había ganado 1600 $ por 3 días en mi vida. Él dijo: ¿cuánto depósito quieres? Yo dije: 500 $. Le envié un contrato y él me envío 1000 $. Cuando llegué allí descubrí que estaba en el programa con Jimi Hendrix y Janis Joplin.” Estos conciertos se celebraron en 1968 y Albert King se convirtió después de éstos en un artista que atraía tanto fanáticos blancos como negros. En el concierto del 1 de febrero del 68 Albert King se metió al público en el bolsillo tocando un par de baladas espectaculares y cambiando una cuerda que se le rompió sin parar de tocar. Después tenía que salir Hendrix, que lo primero que dijo fue: “Ok Albert King, he cogido la indirecta.” Y se puso a tocar al estilo Albert. Albert King también cuenta en alguna entrevista que Jimi y él tocaron un poco de blues con la reina Janis Joplin cantando. Una pena que esos momentos quedaran entre bastidores… Lo que sí se publicó es un álbum con una selección de canciones que dio en aquellos conciertos, se llamó Live Wire/Blues Power.
En el 69 tocó con la Orquesta Sinfónica de St. Louis y
publicó el álbum Years Gone. Durante
1970 realizó una serie de versiones de canciones de Elvis que se recopilaron en el disco Albert King Does the King Things. El 6 de junio actúo en Vancouver, Canadá, con The Doors. Compartieron algunas
canciones. El concierto de Albert
salió a la venta como Live in Vancouver
1970. En el 71 publicó Love Joy.
En 1972 Dan Erlewine le construyó una Flying
V con una pieza de nogal negro de 125 años que llevaba incrustado su nombre
en el diapasón. Fue sometida a lo largo de los años a varias reparaciones, la
más importante después de haber estado 24 horas bajo el agua debido a un
tornado a mediados de los 80. Las 3 guitarras de las que hemos hablado, la Fying
del 58, la del 66 y ésta del 72 están en posesión de un tal Steven Seagal. Posteriormente tuvo
hasta otras 3 Lucy, una de ellas
conocida como la Lucy rosa, otra se la regalaron cuando cumplió 64 años.
En el Festival de Jazz de Montreux en 1977
También en el 72 creó un buen
álbum, I’ll Play The Blues For You.
Lema que se dejaría ver durante los 80 en su autobús de gira. “Si no interiorizas el blues es que tienes
un agujero en el alma.” A partir del 72 abrazó el Funk y con la bancarrota de la Stax
en el 75 llegó un período mediocre. No fue el único bluesman que entró en
desgracia, en éstos años con el atractivo principal de la música pop, rock y disco la mayoría de las compañías dejaron olvidados a los que
tocaban blues o convirtieron su estilo en lo que se llevaba. Fichó por una
compañía pequeña llamada Utopía y
sus discos se convirtieron en un pop simplón demasiado arreglado, en los cuales
se perdía el sonido de su guitarra. Lo único a destacar fue el disco Live Blues de 1977, con su actuación en
el Festival de Jazz de Montreux que
contiene un dueto con el gran Rory
Gallagher en la canción As The Years Go
Passing By. Tras cambiarse a la compañía Tomato Records y seguir en caída libre decidió parar durante 4
años.
Albert
King
volvió en 1983 con el disco San
Francisco 83. En este disco volvía a sus raíces, sin arreglos, guitarra,
bajo, batería y piano de 12 compases. Y para qué más. Una característica son
las charlas habladas de Albert
durante todo el álbum. Algo que no es novedoso en él ni en otros músicos de
blues, que a menudo se dirigían a la multitud con el respaldo rítmico de la
banda. No es que sea de los mejores de Albert
King, pero al menos es una vuelta al blues. También le ayudó en su vuelta
un especial de televisión de hora y media con la estrella del blues del
momento, Stevie Ray Vaughan. Grabado
el 6 de diciembre del 83 en Hamilton, Ontario, Canadá. Una joya.
Aunque durante el resto de los
80 fue perdiendo otra vez fama. Pero, pese a los problemas de salud añadidos,
continúo con giras y apariciones en diversos festivales. Estos últimos años
viajaba junto a su banda en un autobús
Greyhound en el que ponía, como hemos dicho antes, I’ll Play The Blues For You. En muchos de los festivales a los que
acudía AlbertKing daba muestra de bastante indiferencia, pasando más tiempo
ecualizando el sonido de su guitarra o dando órdenes a sus músicos que tocando.
En el 88 acudió al especial B.B. King and Friends. En los últimos años Gary Moore consiguió que la gente
recordara que Albert King todavía
seguía ahí. Tocó en su disco Still Got The
Blues de 1990 y apareció como invitado, junto a Albert Collins, en los
conciertos de su gira europea. En 1991 sacó su último álbum, Red House, en honor a la canción de Jimi Hendrix.
Murió de un infarto el 21 de diciembre de 1992 cuando estaba
preparando una gira a dúo con B.B. King.
Su cuerpo está en Edmonson, Arkansas
y su epitafio reza: I’ll play the blues
for you.